Nahuas


Los nahuas representan el grupo indígena más grande de México y se localiza actualmente en los estados de México, Morelos, Puebla, Veracruz, Hidalgo, Guerrero y Tlaxcala, fueron una de las civilizaciones más importantes del norte de América y Mesoamérica, junto a los mayas, los olmecas, los zapotecas, los mixtecos y los toltecas. Llegaron al centro de México después de los chichimecas y constituyeron siete tribus de la misma nación, que salieron de la mítica Aztlán, los xochimilcas, cholcas, tepanecas, colhuas, tlahuicas, tlaxcaltecas y mexicanos.

Las dos tribus nahuas más grandes, los acolhuas de Texcoco y los tapanecos, se unieron a otro grupo migratorio procedente del norte, los chichimecas, y formaron la Triple Alianza, lo que se conoció como los aztecas. Desde principios del siglo XIV hasta la llegada de los conquistadores españoles, durante 200 años, los aztecas dominaron y gobernaron la mayor parte de la antigua Mesoamérica, desde la ciudad de Tenochtitlán, en lo que ahora se conoce por el valle de México, hasta Costa Rica, en la frontera con Panamá. Los nahuas eran nombrados de diferente manera según la región donde habitaban: en México se llamaron mexicas; en Guatemala, cachiqueles; en El Salvador, pipiles; en Nicaragua, nicaranos o chorotegas y en Costa Rica, guatusos.

La historia de los nahuas es relativamente reciente en Mesoamérica, situada en torno al año 500 d.C. o probablemente después, porque según las leyendas mexicas fue entre los siglos XI y XIII cuando salieron de Aztlán. Los nahuas construyeron un impresionante poder económico, administrativo y guerrero en todo el valle de México. A la llegada de los españoles les impusieron una nueva forma de vida y los dominantes pasaron a dominados, sometieron a los nativos a la explotación, a la esclavitud, y los obligaron a mezclarse con ellos para crear una cultura mestiza y mixta. Aún así, los pueblos que vivían en las afueras del valle de México no se contaminaron de la nueva cultura llegada de Europa, continuaron con sus tradiciones hasta nuestros días, como es el caso del idioma, el náhuatl. Los nahuas establecieron su lengua desde el occidente y centro de Mesoamérica, hasta el sur de Veracruz, Chiapas, el estrecho de Tehuantepec, Guatemala, Cuzcutlán en El Salvador y Ometepe en Nicaragua.

En la actualidad los nahuas, sus descendientes directos, se localizan diseminados, en su gran mayoría, en los municipios de la zona conurbada con la ciudad de México y el oriente del estado, aunque también se hallan en los estados de Morelos, Puebla, Veracruz, Hidalgo, Guerrero y Tlaxcala.

El náhuatl deriva de nahua-tl, que quiere decir "sonido claro o agradable", y tlahtol-li, "lengua o lenguaje". Es una lengua uto-azteca y surgió aproximadamente en el siglo VII, desde la expansión de la cultura tolteca. El náhuatl es la lengua nativa que más hablantes tiene en México, aproximadamente un millón y medio de personas; su uso se extiende hasta Centroamérica o Estados Unidos.

La mayoría del grupo nahua ya no vive de la agricultura como otros pueblos indígenas mexicanos, a diferencia de otros se asientan en núcleos urbanos por lo que sus actividades se emplean en sectores secundarios y terciarios de la sociedad. En cambio, los asentados en zonas rurales, sustentan su economía en lo que produce la tierra que cultivan, como el maíz, frijol, haba y avena, por lo general, y al igual que otros pueblos indígenas cultivan en tierras comunales, que destinan al autoconsumo y lo excedente para la venta. También se da la cría de ganado ovino, porcino y en mayor número las aves de corral; practican la caza y la pesca.

Las creencias religiosas de los nahuas se sincretizan entre el catolicismo y su propia visión del mundo espiritual, tanto celebran las fiestas tradicionales católicas como sus rituales y ceremonias ancestrales. Consideran que el mundo natural está vivo y es sagrado, sobre todo el maíz, del que se dice, se originó en esta zona. Sus ceremonias van destinadas en distintas direcciones, para pedir el orden natural de las cosas y las bendiciones de una serie de dioses que se manifiestan en formas naturales.