Sabaibos


Sobre el pueblo indígena sabaibo es tan poco lo que se conoce que casi todo son suposiciones. Sí se conoce que, antes de su extinción, era un pueblo nómada que habitó en los estados mexicanos de Sinaloa y Durango, en este último exclusivamente en la zona serrana. Dentro de territorio sinaloense lo hicieron en el municipio de Culiacán en la cuenca del río San Lorenzo, en su parte media, y sus caseríos se asentaban en los poblados de Quilá, Tabalá y Alayá. También en el término municipal de Cosalá, en los pueblos de Quetzalla principalmente.

Estuvieron muy relacionados con los acaxees y pacaxes, con quienes convivieron. Los sabaibo, además de cazar y recolectar frutos silvestres, también practicaban la agricultura, y entre sus cultivos estaban el maíz, frijol, chile y calabaza. De igual modo, algunos historiadores creen que los sabaibos y los acaxees no sólo convivieron si no que también estaban emparentados lingüísticamente, al igual que con los xiximes.

Carl Ortwin Sauer dice en su libro Aztatlán: "La separación que Orozco y Berra estableció entre los idiomas sabaibo y tebaca, no es convincente. En los documentos eclesiásticos el término tebaca se refiere a una tribu relacionada con los acaxees, en la cuenca del Humaya. Dicho término parece que se comenzó a emplear cuando el de pacaxe cayó en desuso, pero se refiere a la misma área, y las dos palabras derivan de la misma raíz. Por consiguiente, he decidido clasificarlos juntos. Según parece, el pacaxe era un variante menor del acaxee, o un forma intermedia entre éste y el tahue.

En 1625 los acaxees y sabaibos fueron reunidos en una encomienda (de acuerdo con datos del archivo del Parral). Pérez de Rivas declaró explícitamente que los sabaibos hablaban la misma lengua que los acaxees. Su colocación separada en la clasificación de Orozco y Berra se basa sólo en el hecho de que Ortiz de Zapata, durante la visita a la misión de San Andrés, los identificó por casualidad como uno de los tres grupos lingüísticos del lugar. Sin embargo, dicho jesuita pasó por ahí deprisa, debido a que la situación indígena era muy inestable en esos momentos, y bien pudo confundir lengua con tribu.

En una serie de cartas jesuitas de 1607, traducidas al italiano y de éste al alemán, se sugiere una subdivisión tribal posterior para el acaxee (llamados aquí acagrenses): al este los topiame; al sur, frente a los xixime, los sabaibo; y al oeste los bacaga-tebacas; en el interior del territorio acaxee, los chanmaianis (se desconoce el equivalente español; la ch es probablemente italiana); al noroeste, atrás del río Sinaloa, los carantapas; y en la extremidad norte los baimoas. Estos últimos eran tributarios de los tepehuanes, a quienes los tenían en condiciones extremas de servidumbre, al grado de que estaban obligados en todas las cuestiones de dolor o de muerte".