Zoques


Los zoques son un grupo étnico que habita en los estados mexicanos de Chiapas, Oaxaca y Tabasco. Cultural, geográfica y lingüísticamente tienen una relación de parentesco muy fuerte con los mixes y los popolucas.

Antiguamente, el territorio que acogía a este grupo indígena cruzaba las montañas del estado de Chiapas, especialmente por el norte, y llegó a ocupar gran parte del territorio quiché. Hacia el norte limitaba con el estado de Tabasco, Chontal y Ahualulco; con el territorio mames por el sur; con los mayas, quelenes y chiapanecos por el este y al oeste con los zapotecos. En la actualidad la cuestión geográfica de los zoques ha cambiado, se ha reducido. La mayor concentración se halla en un área de poco más de 3.000 km2. Principalmente en los municipios de Amatán, Coapilla, Copainalá, Chapultenengo, Francisco León, Ocotepec, Ostuacán, Pantepec, Rayón, Solosuchiapa, Tapalapa, Tapilula y Tecpatán. Otras poblaciones tradicionalmente zoques, como Chicoasén, Osumacinta, Tuxtia Gutiérrez, San Fernando y Ocozocoautla, han mermado sus pobladores y apenas quedan tradiciones que las identifiquen con la cultura zoque. Su territorio se ha reducido a la parte occidental de las Montañas del Norte, incluyendo el área volcánica del Chichón, y la transición entre éstas y la Llanura del Golfo.

Se estima que son descendientes de los olmecas, y que en la época prehispánica emigraron mayoritariamente hacia lo que actualmente se conoce como los estados de Chiapas y Oaxaca. Ocupaban parte del territorio del estado chiapaneco, donde prosperó su cultura, apoyada en las buenas relaciones de comercio que mantuvieron con los mexicas. Pero en 1484, aquella prosperidad floreciente que disfrutaban se apagó, cuando fueron invadidos y sometidos por los aztecas en el reinado de Ahuízotl. Después de conquistar Soconusco, el general Mexicano Tilótotl conquistó a los zoques, mames y quelenes, un dominio que tardaría 42 años en desaparecer, hasta la llegada de los conquistadores españoles. La nueva situación política y social, y la obligación a rendir tributo a sus invasores aztecas, provocaron el éxodo y se fueron extendiendo hacia el Istmo de Tehuantepec y el estado de Tabasco.

La ciudad de Quechula, actualmente sumergida bajo las aguas de la Presa Hidroeléctrica Netzahualcóyotl, fue la capital de una de las cuatro tribus principales en las que los zoques estaban divididos. Javepagcuay era la capital de la casta guerrera, que llegó a dominar los extensos valles de Ocozocuautla. Una tercera tribu tenía como sede la ciudad de Guateway, actualmente el pueblo de Magdalena, Coltipán Mezcalapa, y la cuarta fue la actual Cundacán, conocida antiguamente por el nombre de Zimatán.

Zimatán o Cimatán y Quechula o Cachula fueron las dos primeras poblaciones que cayeron en manos de los conquistadores españoles, bajo el mando del capitán Luis Marín. En 1524 Hernán Cortés envió a Marín a conquistar Chiapas, hasta llegar a Tzeputla, sobre el río Grijalva, en Mezcalapa. Seguidamente fue Quechula, en donde el cacique principal de los zoques le proporcionó fuerzas auxiliares para ayudarles en la conquista de Chiapa Nandalumí, la capital de los chiapanecos. Pero Marín continuó su marcha hacia Chamula y envió de regreso a los zoques a Quechula, no volviéndose los españoles a encontrar con ellos hasta 1527, cuando Diego de Mazariego llegó con una fuerza considerable a la capital zoque. En esta ocasión también le proporcionó el cacique un buen número de guerreros para la ocupación definitiva de la ciudad de Chiapas. Los chiapanecos cayeron derrotados y los zoques recuperaron el rancho Tulún, que anteriormente había pertenecido a los zoques y que más tarde se convertiría en el pueblo de Acapala, la ciudad de Tuxtla, actualmente Tuxtla Gutiérrez.

Luego se crearon las encomiendas y se estableció el reparto de los zoques entre los encomenderos, obligándoles al trabajo forzado y a excesivos tributos. Al igual que en otras partes de los territorios conquistados por los españoles, los zoques también se rebelaron contra las injustas situaciones a las que los tenían sometidos, pero los colonos consiguieron sofocar los intentos que se dieron. Las enfermedades, la explotación y las condiciones de miseria en las que vivían fueron las razones más importantes por las que mermaron el número de zoques.

Con la independencia de la República tampoco mejoraron sus condiciones de vida, que continuaron siendo explotados por los mestizos y criollos. Las nuevas leyes de reforma del siglo XIX tampoco les beneficiaron, pues fomentaron la concentración de la tierra en manos de grandes terratenientes que siguieron explotándolos en las grandes haciendas. La creación de los estados federados también les perjudicó, contribuyó a la fragmentación étnica, siendo la zoque una de las fragmentadas por la división de sus territorios, quedando dividida entre Chiapas, Oaxaca y Tabasco, dejando a su vez a los zoque-popolucas en el estado de Veracruz.

Los zoques de Chiapas se llaman a sí mismos O'depüt, "gente de palabra", y los Chimalapas Angpon, "los que hablan la lengua". Las lenguas zoqueanas constituyen un grupo lingüístico que pertenecen a la familia mixe-zoqueana, es la única lengua no mayense hablada en el estado de Chiapas. El zoque lo hablan alrededor de 100.000 personas y representan el 9% de los hablantes indígenas de México.

La agricultura es la principal actividad económica del grupo étnico, por lo general sus plantaciones son de maíz, frijol, chile, calabaza, café, cacao, pimienta, plátano, mamey, anoma y guayaba. Crían puercos y aves de corral en pequeñas cantidades para su alimentación.

Sus viviendas tradicionales se construyen con paredes de bajareque, techo de zacate y el piso de tierra. En estos nuevos tiempos que corren los hogares tradicionales solo se ven en las rancherías más alejadas de los núcleos urbanos, y en la actualidad se van construyendo con otros materiales como el cemento, ladrillo, piedra y lámina. Generalmente suelen ser rectangulares y cuentan con una sola habitación y un anexo más pequeño para cocina. También cuentan con un patio o solar donde cultivan árboles frutales, limones, naranjas, mangos, anomas, plátanos y flores y plantas para uso medicinal y culinario.

Las creencias religiosas de los zoques se las disputan tres opciones distintas: los católicos, los adventistas o protestantes y los que se reconocen como "costumbreros". El rechazo y la falta de reconocimiento de unos a otros propicia conflictos por la obtención de poder.